Desde hace tiempo algunos warao cambiaron el agua de sus caños por el asfalto de la ciudad. La flecha que les abrió el suelo del cielo y les mostró la abundancia de alimento, como cuenta uno de sus mitos fundantes, aún yace en sus memorias. Foto: Minerva Vitti Rodríguez
Una niña de dos meses es el primer caso de covid-19 entre indígenas warao en Manaus, Brasil. José Lisardo Moraleda, maestro warao, originario de Nabasanuka, nos cuenta las pésimas condiciones sanitarias en que viven en los albergues en Brasil. Aunado a esto los indígenas venezolanos no tienen suficientes alimentos para cumplir con el aislamiento preventivo y deben salir a las calles a pedir dinero. A pesar de que los migrantes warao se han establecido en refugios en Brasil, algunos de ellos, después de un tiempo, regresan al delta del Orinoco, en Venezuela, lo cual constituye un riesgo epidemiológico que debe ser tomado en cuenta por las autoridades de ambos países.